Depurando conocimiento

En esta ocasión les traigo un relato sobre cómo experimenté una sobrecarga de información por seguir demasiados feeds RSS, llegando a un punto donde la mayoría de los artículos ya no me interesaban para nada y de como lo resolví con un poco de Javascript cuando podría, simplemente, haber dejado de seguir dichos feeds (cosa que dicho sea de paso en realidad sí termine haciendo en muchos casos).

Podría haber dejado de seguirlos, pero… ¿Y si justo entonces decidiesen publicar algo de mi interés? Pues sí, puede pasar; pero ¿realmente va a tener eso un impacto en tu vida? Probablemente no.

Por supuesto, lo mejor, en realidad, sería superar ese miedo ridículo a “perderse algo” y poder tener una dieta baja en información y prácticamente nula en datos, a menos que alguna de nuestras actividades lo requiera.

Y ¿Por qué podemos querer información que no necesitamos ahora? La única respuesta legitima que se me ocurre es para poder responder más rápidamente ante alguna necesidad relacionada. Sin embargo, ese argumento se derrumba enseguida si uno sabe realizar búsquedas en internet con, por lo menos, un mínimo de eficacia. ¿Cuánto tardamos hoy en día en acceder a la información que queramos en el momento que la necesitamos con todas las herramientas tecnológicas con las que contamos (las cuales por cierto son cada vez más, ya que a los históricos buscadores web como Google ahora se suman nuevas herramientas impulsadas por inteligencia artificial como ChatGPT)?

Aunque apenas voy escribiendo 4 párrafos de este artículo, hacerlo me está costando más de lo que esperaba y el proceso me está tomando varios días. Días en los cuales me estoy suscribiendo de cada vez más feeds al darme cuenta de, realmente, no necesito la información que me brindan.

Por un lado, mantenerme al tanto de la actualidad nunca me resultó una prioridad, y si realmente ocurre un hecho que sacude al mundo, de todas formas uno se entera enseguida al hablar con otras personas. Mi mayor interés con los feeds siempre fue adquirir conocimiento y hasta hace dos días estaba perfectamente preparado para justificar eso en este post. Pero cuanto más lo pienso, más se arraigan dentro de mí varios conceptos que leí recientemente sobre cultivar la ignorancia selectiva.

Este ejercicio me está resultando de lo más enriquecedor, así que voy a proponerles que lo prueben.
Los pasos son los siguientes:

  1. Infórmense brevemente sobre la ignorancia selectiva, personalmente recomiendo leer el capítulo 6, The Low-Information Diet, del libro The 4-Hour Workweek de Tim Ferriss.
  2. Hagan un repaso mental de todas las fuentes de información que utilizan día a día. Desde diarios en papel hasta redes sociales, pasando por diarios digitales y RSS. Todos cuentan.
  3. Ahora calculen cuanto tiempo le están dedicando a consumir toda esa información y compárenlo con cuanto tiempo están dedicando a emplear esa información.

Eso es todo, luego de la comparación cada uno debería saber si quiere seguir distribuyendo su tiempo de la misma manera que lo estaba haciendo.

Al menos para mí, deshacerme de toda esa información me genera una inexplicable incomodidad en todo mi ser. Por suerte, no es necesario llegar al extremo de eliminar por completo la “ingesta” de información y existen puntos intermedios como el uso de curadores de contenido. Lo más importante en estos casos es tener el cuidado de no terminar cayendo en sesgos cognitivos como el filtro de burbuja, la cámara de eco o el sesgo de confirmación.
En cuanto a curadores de contenido, llegado este punto, me veo contractualmente obligado conmigo mismo a comentarles que si les interesa la programación o el management puede servirles mi Recopilador de contenido curado.

Sobre filtrar noticias con Javascript y otras yerbas

Sí, originalmente este artículo era sobre un pequeño proyecto que desarrollé en Javascript para filtrar noticias en Feedly.

Al menos para mí, con el pasar de los párrafos esto ya pasó a un segundo plano, pero si aún les interesa el proyecto (el cual, de hecho, sigo utilizando para filtrar los feeds a lo que quedé suscripto) pueden encontrar el mismo en su repositorio de Github: Feddly Denoiser.

Su funcionamiento es muy simple y se encuentra explicado en el README del repositorio, pero si tienen dudas, consultas o sugerencias de mejora no duden en contactarme mediante un Issue en Github o directamente, vía e-mail.

Si, como yo, utilizan Feedly en sus dispositivos móviles, también podría resultarles interesantes una automatización que desarrollé para ejecutar Feedly Denoiser en Github Actions pueden encontrar aquí.

Terminando

Estimados, esto fue todo por hoy. En breve seguramente esté actualizando la lista de feeds RSS de mí post anterior.

Y si todo sigue según el plan muy pronto, tanto este blog, como el recopilador de contenidos curados, deberían contar con sus propios feeds RSS para que puedan seguir.

Si quieren hacerme algún comentario, hablar, o sienten la irrefrenable necesidad de discutir acaloradamente mis opiniones, siéntanse libres de escribirme a: [email protected].

Actualizaciones

Desde Feedly requiere de una suscripción de pago para poder utilizar su API REST por lo que no continuaré utilizando ni dando mantenimiento a Feedly Denoiser.